miércoles, 20 de diciembre de 2017

GANADERÍA.


Una aparentemente inocente cámara en una ciudad, en un semáforo, en un centro comercial, autopista, estación de tren, aeropuerto, centro oficial, o negocio privado con cámaras, pasa sus imágenes a PRISM, y este a PALANTIR. Analiza biométricamente todos y cada uno de los rostros y detalles, matrículas, el texto de un libro que llevemos en la mano, o los objetos o bolsas que transportemos, o con quién vayamos caminando o en el coche. 
Vemos las cámaras como un mobiliario urbano más, sin dar importancia al control orweliano al que estamos sometidos, y que toda esa información que la mayoría considera inocente o que no le dan importancia, están pasando a todo un historial de vida de cada individuo en memorias gigantes de super ordenadores que conocen todo de nosotros, hasta lo que hacemos en nuestro salón delante del televisor con la nueva tecnología Samsung  -que fue pionera pero que ya incorporan el resto de marcas-, que convierte el televisor en una vídeo cámara de imagen y receptor de sonido de nuestras conversaciones y actos. Su capacidad es selectiva y puede seleccionar hasta cada conversación o gesto de un grupo mientras miran un partido de fútbol en un bar.

Palantir Thecnologies en Palo Alto, California es una empresa privada contratada directamente por el Mossad, la NSA y la Cia. Son los desarrolladores del proyecto Prisma.


Eladio Fernández. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario