miércoles, 29 de junio de 2016

RETRATO.


¿Y el pueblo?, se preguntarán. El pensador o el historiador que emplea esta palabra sin ironía se desacredita. El pueblo se sabe ya a qué está destinado: a sufrir los acontecimientos y las fantasías de los gobernantes, prestándose a designios que lo invalidan y lo abruman. 

Cualquier experiencia política, por avanzada que sea, se desarrolla a su expensas, se dirige contra él: el pueblo lleva el estigma de la esclavitud por decreto divino o diabólico. Es inútil apiadarse de él: su causa no tiene apelación. Naciones e imperios se forman por su complacencia en las iniquidades de las que es objeto. No hay jefe de Estado ni conquistador que no lo desprecie, pero acepta este desprecio y vive de él. 
Si el pueblo dejara de ser endeble o víctima, si flaqueara ante su destino, la sociedad se desvanecería , y con ella la Historia. 

No seamos demasiado optimistas: nada en el pueblo permite considerar una eventualidad tan hermosa. Tal como es, representa una invitación al despotismo. Soporta sus pruebas, a veces las solicita, y sólo se rebela contra ellas para ir hacia otras nuevas, más atroces que las anteriores. Siendo la revolución su único lujo, se precipita hacia ella, no tanto para obtener algunos beneficios o mejorar su suerte, como para adquirir también su derecho a la insolencia, ventaja que le consuela de sus decepciones habituales, pero que pierde tan pronto como son abolidos los privilegios del desorden.

Como ningún régimen le asegura su salvación, el pueblo se amolda a todos y a ninguno. Y desde el Diluvio hasta el Juicio Final, a lo único a que puede aspirar es a cumplir honestamente con su misión de vencido.

E. Cioran. Historia y utopia.

martes, 28 de junio de 2016

GANADERÍA.


Era tradicional que las monarquías utilizaran el sentimiento religioso como acicate al valor y disciplina de los soldados. Privado del culto católico, el ejército francés del periodo napoleónico utilizó el culto patriótico. 

En la batalla de Valmy, los oficiales habían comprobado como el grito ¡Viva la Nación! producía en los soldados notable entusiasmo. Tras varios años de guerras patrióticas se constituyó el espíritu militar francés, capaz de superar con ventaja los sentimientos despertados por las antiguas ideas de “los soldados al servicio de la Religión y el Trono”. 
La ideología militar francesa se basó en exaltados sentimientos de amor a la Francia revolucionaria, adhesión a Napoleón y culto al honor, fermentado por los antiguos militares que nutrieron los primeros cuadros de 1789. El entusiasmo fanático se fomentó en los ritos militares y civiles. Cualquier fiesta cívica motivaba un desfile militar, que presentaba a los soldados el sentimiento de la propia importancia y a los paisanos les vinculaba a los conceptos de la Francia oficial.

La actitud entusiasta servía también para integrar a los reclutas belgas, holandeses, italianos, hamburgueses... que las sucesivas anexiones convertían en soldados de Francia. El entusiasmo era necesario para soportar la vida de los errabundos militares del imperio.

Gabriel Cardona. Historia del ejército.

lunes, 27 de junio de 2016


Y MÁS TRUCOS.


David Steele, oficial de inteligencia durante 20 años, en una entrevista del Event Chronicle, declara: 
"La mayoría de los ataques terroristas son falsas banderas, o son creados directamente por nuestros propios servicios de seguridad. En Estados Unidos, cada ataque terrorista individual es obra del gobierno o ha sido provocado por un informante del FBI. De hecho, ahora tenemos los ciudadanos sacando órdenes de protección contra informantes del FBI que están tratando de incitar al terrorismo. 
Nos hemos convertido en un manicomio ".

domingo, 26 de junio de 2016


MÁS TRUCOS.


En esta irresistible experiencia de exhibicionismo que suscitan las redes “sociales”, el individuo, transparente, comparte sus afectos ajeno al uso que el mercado hará de ellos. 

Este capitalismo de la emoción acumula enormes cantidades de datos con los que trafica y da forma a un inconsciente global capaz de predecir hábitos de consumo para orientar la maquinaria productiva.

La cibernética se ha convertido en una nueva ciencia del gobierno creando a la vez una nueva humanidad: una ontología, una estética, una lógica y una antropología al servicio del capital.

Germán Santiago y Belén Quejigo. Capitalismo de la emoción.


jueves, 23 de junio de 2016

GANADERÍA.


La estructura básica de la escolarización moderna fue asentada durante la toma del poder de la India por parte de los británicos a finales del siglo XVIII.

Durante aquel período, en aquel preciso lugar, se descubrió que los secretos del éxito en el control de las masas residían en ocho directrices utilizadas por la aristocracia hindú en el tipo de formación primaria dirigida a la joven plebe:


1)En lugar de desarrollar habilidades, ejercitar la memorización.

2) En lugar de ejercicios destinados a formar una opinión propia, inculcar determinados hábitos y actitudes.

3)Poner límites estrictos a las preguntas de los estudiantes.

4)Poner límites estrictos a la asociación entre estudiantes.

5) Frecuentes pruebas sobre el material memorizado. Hacer pública la calificación obtenida en las pruebas.

6)Denegar al estudiante todo derecho a iniciar un currículum personal.

7)Larga reclusión en condiciones de inmovilidad y silencio.

8) En un entorno extraño, entre personas y rutinas extrañas, colocar al estudiante bajo la dirección de extraños que ponen freno a toda
tentativa de establecer una relación alumno-profesor personal.


Esta receta impresionó al capellán militar británico Alexander Bell, que publicó una versión de la misma en 1797 en Londres.
Pensó que una receta tal podría resultar de utilidad para dirigir el propio orden social clasista de Gran Bretaña.

Pocas veces un único y breve ensayo ha tenido tanta influencia en la historia mundial. Al cabo de poco tiempo, las palabras de Bell eran leídas con interés en los círculos gubernamentales del mundo entero.

John Taylor Gatto.

lunes, 13 de junio de 2016

CITAS.


Se diría que la docilidad de la población en contextos histórico sociales objetivamente explosivos, bajo parámetros de sufrimiento, injusticia y arbitrariedad a todas luces insoportables, es un fenómeno recurrente a lo largo de la historia de la humanidad y, en su paradoja, uno de los rasgos más llamativos de las sociedades democráticas contemporáneas. Aparece, a la vez, como un objeto de análisis tercamente excluido por nuestras disciplinas científicas y una empresa de investigación que nuestros doctores parecen tener contraindicada.
¿Por qué?.

Pedro García Olivo. El enigma de la docilidad.



Cualquiera que ha estudiado la Historia sabe que la desobediencia es la primera virtud del hombre. 
Es gracias a la desobediencia y la rebelión por lo que éste ha progresado.

Oscar Wilde, El alma humana.


miércoles, 8 de junio de 2016

CURSILLO.


No es el sufrimiento causado por las frustraciones lo que produce las enfermedades psíquicas, sino la prohibición de vivir y articular dicho sufrimiento, aquél dolor sentido ante las frustraciones padecidas.




El niño debe aprender a aceptar los absurdos y los caprichos de sus educadores sin reparos de ningún tipo ni sentimientos de odio, y al mismo tiempo, condenar y matar en sí mismo cualquier deseo de acercamiento físico y espiritual a otro ser humano que pudiera aliviar esa carga. Se trata de una hazaña sobrehumana que sólo se exige a los niños, pero que jamás se espera de los adultos.




El condicionamiento y la manipulación de los demás han sido siempre un arma y un instrumento en manos de los poderosos, aunque los hayan camuflado con palabras tales como "educación" o "tratamiento terapeútico".





Mi optimismo reposa en la esperanza de que la opinión pública no siga tolerando el encubrimiento de malos tratos en la educación,una vez que haya advertido:

1.-Que la educación no se realiza en el fondo por el bien del niño, sino para satisfacer necesidades de poder y de venganza de los educadores.

2.-Que no solo el niño objeto de malos tratos puede verse afectado por ellos, sino que todos nosotros podemos ser también futuras víctimas de su odio no integrado.


Alice Miller. "Por tu propio bien. Raíces de la violencia en la educación del niño".

domingo, 5 de junio de 2016


TENDENCIAS.


Si no nos equivocamos en nuestra apreciación, lo que vamos a sufrir en los próximos años a nivel global, es una progresiva intensificación de este hollycapitalismo crítico, en la forma de una guerra de cuarta y quinta generación permanente y total, en todos los frentes, contra todos. 
Como sabemos las élites dominantes recurrirán al viejo divide y vencerás, que no deja de ser la mecánica de escenificación hierogámico-sacrificial, la de buenos y malos, víctimas y verdugos, todo ello mientras su obscenidad se esconde detrás de la escena. Por eso es importante que comprendamos esta mecánica y la desenmascaremos.
Podemos considerar el 11S de 2001 como el acto inaugural de este régimen distópico que tenderá a implantar progresivamente un Nuevo Orden Mundial orwelliano, en el que el régimen capitalista de intercambio de mercancías sea superado y de paso a un régimen hollycapitalista de intercambio de mercancías humanas regulado por flujos de deseo y de amenaza. 
Un gran ritual MKUltra y al mismo tiempo una gran producción hollywoodense. La ficción distópica convertida en realidad.

Pedro Bustamante.




El hecho de que vivamos en sociedades disciplinarias no significa que se nos esté obligando a vivir un modo de vida que de otro modo no escogeríamos. 
El poder disciplinario no supone coacciones externas como si nuestra individualidad espontánea y libre de pronto se topara con una imposición venida de fuera que reprimiría nuestro poder de decisión y nuestra libertad. 
No, estimado lector, el poder de los regímenes disciplinarios es mucho más sutil y modesto, mucho más… insidioso. 
En estricto sentido, lector mío, nosotros somos la disciplina.

Carlos Béjar.




Más que un futuro de centralidad teocrática, lo que se entrevé es un horizonte de nihilismo tecnológico muy eficaz, hiperproductivo y desesperado.

Giovanni Iozzoli.
Reseña de Neurocapitalismo, de Giorgio Griziotti.


miércoles, 1 de junio de 2016

BLABLADURÍAS.


Al parecer hay un gran proyecto secreto mundial en marcha sobre lo que se llama vulgarmente transhumanismo, que no es convertir al humano en robot o fusionar algunas partes para mejorar su vida, sino que es la manera de tener control absoluto de la persona, de su cuerpo, de sus pensamientos, de sus emociones, hasta de su alma, para beneficio de esta élite psicópata que gobierna el mundo en y desde la sombra.

Radio Macuto.