INDAGACIÓN 1.

En 1939 U.G. Krishnamurti se acercó a Ramana Maharsi con algo de desconfianza y recelo y le hizo tres preguntas:

"¿Existe la Iluminación?"

"Sí, existe", contestó el maestro.

"¿Hay niveles en ella?"

El Bhagavan contestó: 
"No, los niveles no son posibles, es una sola cosa, tu estas allí del todo o no lo estas."

Finalmente U.G. preguntó: 
"Esta cosa llamada Iluminación, ¿me la puede usted dar a mi?"

Mirando a las ojos al serio joven le contestó: 
"Sí, puedo dártelo pero, ¿puedes tu recibirlo?"

Desde ese día U.G. fue perseguido por su pregunta e implacablemente se cuestionaba, ¿qué es lo que no puedo tomar?. 
Decidió allí mismo que fuera lo que fuera lo que Maharshi estuviera señalando, el sí podía recibirlo. 

Diría luego que este encuentro había cambiado el curso de su vida y le había puesto nuevamente en "el camino".