LUCES.

Se ha descubierto que el cerebro de los mamíferos es capaz de producir biofotones, esto es fotones apenas visibles, que van desde casi el infrarrojo a la luz ultravioleta. 
La pregunta evidente es ¿para qué produce estas pálidas fosforescencias el cerebro?.
Los científicos han concluido que es posible que exista un sistema de comunicación óptica en el cerebro, esto es, una infraestructura sobre la cual la luz puede viajar de manera coherente de una parte a otra del mismo.

Desde hace algunas décadas, el biólogo alemán Fritz Albert Popp ha investigado estos biofotones producidos por las células de animales y plantas. 
Popp mantiene que la comunicación biofotónica de un organismo podría ser determinante para procesos metabólicos y de comunicación celular. 
También apunta la posibilidad de que la conciencia esté basada en la luz.

Por su parte, Carl Jung en su libro "Sobre la naturaleza de la psique", escribe:
Ya que la conciencia siempre ha sido descrita en términos derivados del comportamiento de la luz, en mi opinión no es exagerado pensar que estas múltiples luminosidades corresponden a diminutos fenómenos conscientes. 
Esta luz sería la "lumen naturae" que ilumina la conciencia.