EL CHIP.
Por motivos religiosos y por la clara asociación con “la marca de la bestia”, Ángela Hernandez, de 15 años, se negó a portar una credencial con chip que permite localizar a los alumnos de todo un distrito escolar en Texas; por su renuencia a acatar esta orden, la escuela la expulsó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario