domingo, 29 de septiembre de 2019
TONTEORÍAS, LAS JUSTAS.
El feminismo de nueva ola es un movimiento eminentemente identitario y, por definición, excluyente. Sólo las mujeres que asumen sin matices la condición de víctimas de un sistema heteropatriarcal son aceptadas en la colmena, en la que no cabe la mujer libre, considerada como individuo.
La cruda realidad es que las mujeres, consideradas como un colectivo, sólo somos víctimas de estos nuevos feministas identitarios, que nos quieren sumisas y obedientes dentro de su colmena, para así agitar el avispero cuando les convenga electoralmente. Porque somos sus instrumentos para alcanzar el poder, su excusa para colonizar las instituciones y acceder a cargos que de otra forma difícilmente conseguirían.
Pero que no nos quepa duda de que, una vez conseguidos sus objetivos, nos tratarán como a un trapo usado.
Guadalupe Sánchez Baena.
Tamara Burke, fundadora de Me Too, asegura que el movimiento contra la violencia sexual que ella fundó se ha vuelto irreconocible. La reacción mediática lo ha enmarcado en una caza de brujas. ´De repente un movimiento centrado en quienes sobrevivieron a la violencia sexual se ha tornado en un boicot vengativo contra los hombres´.
Desde 1975, año en que se llevó a cabo la primera gran encuesta nacional sobre violencia doméstica en los Estados Unidos, el número de estudios similares realizados en todo el mundo no ha dejado de crecer. Actualmente, varios cientos de estudios empíricos demuestran de modo concluyente:
1) que hombres y mujeres ejercen la violencia de pareja en proporciones similares;
y 2) que, estadísticamente, la mujer es la principal iniciadora de las agresiones físicas en la pareja, y es falso que la violencia femenina sea exclusivamente de autodefensa.
Ese cuerpo mundial de estudios sobre violencia en la pareja debería ser el fundamento estadísticamente correcto de las políticas y legislaciones sobre violencia doméstica, si no estuviese permanentemente excluido de ellas por resultar políticamente incorrecto y contrario a los prejuicios ideológicos vigentes.
No ficción. Blog.
No se debería permitir a ninguna mujer que se quedara en casa para criar a sus hijos. La sociedad tendría que ser completamente distinta. Las mujeres no deberían tener esa opción, precisamente porque si existe tal opción, demasiadas mujeres la van a tomar.
Simone de Beauvoir.
La Escuela de Frankfurt, para afianzar el marxismo cultural diseñado por el revolucionario comunista Antonio Gramsci, dio ´recomendaciones para la transformación y disolución de la sociedad´ y entre otras propuso las siguientes pautas:
l) Fomentar la desintegración familiar;
2) Hacer depender a los ciudadanos del Estado o de los beneficios del Estado;
3) Mantener un sistema legal desacreditado, con prejuicios contra las víctimas del delito;
4) Promocionar el vaciamiento de las Iglesias;
5) Promover el consumo excesivo de bebidas alcohólicas y drogas;
6) Causar migraciones para destruir la identidad de los pueblos;
7) Fomentar la destrucción de la autoridad en los Colegios y Universidades;
8) Suscitar la invención de delitos sociales y el cambio continuo para crear confusión;
9) Fomentar la homosexualidad en los niños.
El feminismo es una invención nuestra por dos razones: Anteriormente sólo la mitad de la población pagaba impuestos, ahora casi todos, porque las mujeres también trabajan; además, la familia ha sido destruída y de ese modo hemos obtenido poder sobre los niños, que ahora están bajo control nuestro y de los medios de comunicación; adoctrinados con nuestros mensajes ya no están bajo la influencia de la familia intacta.
Nicholas Rockefeller.
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