martes, 5 de julio de 2011

GANADERÍA.

EL BICHO.

Tenemos un compañero de por vida .Tenemos un predador que vino desde las profundidades del cosmos y tomó control sobre nuestras vidas. Los seres humanos son sus prisioneros. El predador es nuestro amo y señor. Nos ha vuelto dóciles, indefensos. Si queremos protestar, suprime nuestras protestas. Si queremos actuar independientemente, nos ordena que no lo hagamos.
- Pero ¿por qué este predador ha tomado posesión de la manera que usted describe, don Juan?. Debe haber una explicación lógica.
- Hay una explicación - replicó don Juan -, y es la explicación más simple del mundo. Tomaron posesión porque para ellos somos comida, y nos exprimen sin compasión porque somos su sustento. Así como nosotros criamos gallinas en gallineros, así también ellos nos crían en humaneros. Por lo tanto, siempre tienen comida a su alcance.
Quiero apelar a tu mente analítica - dijo don Juan -. Piensa por un momento, y dime cómo explicarías la contradicción entre la inteligencia del hombre-ingeniero y la estupidez de su sistema de creencias, o la estupidez de su comportamiento contradictorio. Los chamanes creen que los predadores nos han dado nuestros sistemas de creencias, nuestras ideas acerca del bien y del mal, nuestras costumbres sociales. Ellos son los que establecieron nuestras esperanzas y expectativas, nuestros sueños de triunfos y fracasos. Nos otorgaron la codicia, la mezquindad y la cobardía. Es el predador el que nos hace complacientes, rutinarios y egomaniáticos.
- ¿Pero de qué manera pueden hacer esto, don Juan?¿Susurran todo esto en nuestros oídos mientras dormimos?
- No, no lo hacen de esa manera, ¡eso es una idiotez! - dijo don Juan sonriendo -. Son infinitamente más eficaces y organizados que eso. Para mantenernos obedientes y dóciles y débiles, los predadores se involucraron en una maniobra estupenda (estupenda, por supuesto, desde el punto de vista de un estratega). Una maniobra horrible desde el punto de vista de quien la sufre. ¡Nos dieron su mente! ¿Me escuchas? Los predadores nos dieron su mente, que se vuelve nuestra mente. La mente del predador es barroca, contradictoria, mórbida, llena de de miedo a ser descubierta en cualquier momento.

Nos otorgan problemas banales y de esa manera nos mantienen vivos para alimentarse con la llamarada energética de nuestras seudopreocupaciones.

Carlos Castaneda. El lado activo del infinito.

No hay comentarios:

Publicar un comentario